Transitan los idus de mayo… Y la convocatoria al VI Congreso?
Muchos cubanos desconfían en que se convoque para este año y otros no creen que resulte consecuente con las expectativas del pueblo.
Miguel Arencibia Daupés | Para Kaos en la Red | 4.05.09.- 19:33 www.kaosenlared.net/noticia/transitan-idus-mayo-convocatoria-vi-congreso
Recibido de Enrique Lopez Oliva
Antes, no estuvieron dadas las condiciones para celebrar el Congreso del PCC. Cuando se fue a convocar, se nos enfermó el comandante en jefe.
Así -aunque no literalmente sí en el sentido de lo manifestado- se refirió a mediados del 2007 un miembro del Comité Centraldel PCC, en respuesta auna pregunta que se le efectuara durante un curso para cuadros de esa organización partidista “monopólica”de nuestro país.
Lo dicho por el mencionado hubiera sido, tal vez, entendible si hubiera podido explicar cuáles eran y por qué tanta ausencia de las alegadas condiciones y de su análisis con la base, al igual que si no se tuviera en cuenta que la grave situación de salud de Fidel ocurrió a fines de julio de 2006, mientras que a comienzos del propio mes se celebró el V Pleno del Comité Central -ocasión en que se llegó hasta a reconstituir el Secretariado, órgano del CC que años atrás se decidiera eliminar- sin que en dicho Pleno, como oportunidad que se pintaba sola para ello, se convocara al diferido Congreso.
Rebobinando la memoria, recordamos que durante los años 90´s las consignas políticas se encaminaban a poner en primer plano la importancia de la existencia y la necesidad del mejor funcionamiento del PCC. Se instaba a hacer entre todos un partido de acero, incomparable garantía para la continuidad de la Revolución.
Poco después, principalmente con la batalla y victoria de todo el pueblo, dirigida por Fidel, parael regreso del niño Elián (desconocíamos en ese entonces en Cuba el apresamiento de nuestros cinco héroes) la casi unanimidadde los lemas de ensalzamiento al PCC sufrieron un giro de 180 grados hacia determinadas personalidades cubanas y foráneas. Con tal intencionalidad, variedades de carteles fueron impresos y grandes vallas se erigieron en las principales arterias de la ciudad, lo cual siguiera por los restantes años.
Y la plataforma programática partidista que no se elaboró, analizó, discutió ni aprobó en el V Congreso, mantuvo su extraña omisión.
A fines del 2007, Raúl señaló que, más por ser único nuestro partido, resultaba indispensable (agrego yo: y urgente) proveerlo de democracia interna. Para ello, pensamos, deben ser establecidas nuevas estructuras, normas, métodos y estilos de trabajo. Pero…
¿Cómo obtener esa democracia interna sin empezar por aprobar, mediante el más amplio colegiamiento,los principios en que se asentaría ella, hoy fuertemente minimizada? ¿Cómo tener un nuevocomienzo en esa asignatura aún no aprobada, sin la celebración de nuestro super-pospuesto Congreso?
Si no recuerdo mal, las convocatorias anteriores se han producido tempranamente en el año (febrero)y las celebraciones en octubre, próximas al independentista Grito de Yara.
En marzo, un funcionario del CC me comentó que se manteníala idea de celebrarlo a fines del actual año, que se elaboraban los proyectos de documentos a analizar y a aprobar e, incluso, que es pretensión que los mismos no sean discutidos solamente por la militancia sino, también, por el resto de la población. Sin embargo, adicionó que preveía la convocatoria para el mes de abril, lo cual no se produjo.
Pese a que se ha dado algunas somerasinformaciones a través de los CDR, hay millones de cubanos que no creen en que se convoque este año el enunciado evento, y otros millones –o, en parte, los mismos- que desconfían en que, de celebrarse, tenga la trascendencia que la coyuntura nacional requiere.
Sobre esto último y de forma contundente (“No confío en el VI Congreso”), se expresó, hace dos meses, un destacado y apreciado intelectual criollo en uno de los dos espacios de debates existentes en la capital del país, sin que el nutrido y politizado auditorio se desconcertara para nada ante su decir.
Dado el seguimiento de las - hasta ahora- utopías socialistas en que se han afianzado mis más de 30 años de militancia ininterrumpida dentro de las filas del PCC, he querido disentir de esos incrédulos. Necesito, como lo precisa Cuba entera, creer en que se cumplirá la más inmediata convocatoria del Congreso, que éste será efectuado en el presente año y, sobre todo, que su celebración no será de mero trámite.
Por el contrario, que se llegará al mismo con el debido previo estudio de las tesis y que éstas cubrirán el imprescindible diapasón de determinaciones ante las innumerables necesidades que han seguido acumulándose desde 1997, aquel remoto año en que se produjera el anterior evento.
Para lo señalado, estimo muy útilla consideración de la Propuesta Programática que el historiador Pedro Campos y varios colaboradores sometiéramos al pueblo, a mediados del año 2008, desde las páginas de Kaos/Cuba y a través de las más disímiles vías, dado lo cual, también, resulta un documento conocido por la dirección del PCC.
Quiero creer que, a partir del VI Congreso, mi partido, el de casi medio millón de militantes, desempeñará completamente su histórico rol. Será por fin el detonante de un proceso de democratización nacional que incluirá -como protagonistas y no sólo seguidores- a la totalidad de los cubanos, principalmente a los de “a pie”. Proceso por el que se implementaría los cambios estructurales que el país requiere y, de manera rápida y concreta, los derechos civiles y políticos, en consecuencia con los principios constitucionales y los pactos de la onU signados por Cuba en los inicios de 2008.
Asumo mentalmente y en mi corazón que en lo adelante, de una vez y por todas,al mismo nivel de la soberanía y libertad que como país tenemos, y de los deberes patrios, estarán los inalienables derechos a disfrutar por cada ciudadano sin necesidad de previos permisos o autorizaciones. En fin, que serán realmente socializadas las decisiones sobre el universo de las cuestiones económicas y políticas que atañen a todo el pueblo, como debe ser en un proyecto como el nuestro.
No obstante, me preocupa mucho que cayeran las primeras lluvias del quinto mes del año sin que refrescaran una convocatoria que no acaba de brotar. Esperemos no tengan razón los descreídos…
Confiemos una vez más…
Ciudad de la Habana, 4 de mayo de 2009.
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1 comentario:
Coincido plenamente con que se ha dilatado en demasía la celebración del 6º Congreso. Pero no deja de ser cierto que realizarlo de modo precipitado, sin una definición clara sobre una serie de aspectos y dificultades cardinales para la vida en la sociedad cubana, no haría más que convertir a tan importante cónclave en un mero evento de puro trámite -como bien afirma usted.
Lo anterior atentaría contra la imagen de nuestro Partido, al cual me siento sumamente honrado de pertenecer.
Otro aspecto que me preocupa es la elección del Segundo Secretario del CC PCC; pues la elección del Primer Secretario debe recaer sobre el compañero Raúl: méritos históricos y capacidad le sobran.
De primera mano, he conocido que el 6º Congreso se desarrollará en 2010, incluso posterior al 9º Congreso de la UJC.
Confío plenamente en que saldremos de este 6º Congreso con una Revolución más fuerte y con un renovado compromiso de las nuevas y vijeas generaciones respecto al proyecto social que construimos.
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