DÍA DE LA BIBLIA
El primer domingo de diciembre celebramos en Cuba el Día de la Biblia. ¡Precioso acontecimiento!
Soñamos que en próximas celebraciones podamos montar en lugares públicos exposiciones y puestos de ventas con la Palabra de Dios; que se puedan tener conferencias y promociones a través de los medios masivos sobre el mejor libro del mundo. Soñamos que en estas celebraciones tengamos desfiles de carrozas con temas de la Biblia, y a través de la televisión podamos ver filmes y dibujos animados con las bellas historias de la Santa Palabra de Dios.
Este sueño de darle a La Biblia un homenaje anual en toda la nación, no es un una locura, ni mucho menos la idea caprichosa de un grupo de fanáticos dentro de la sociedad cubana. No lo es porque la Biblia es “única”
· Es única en su circulación: El libro mas leído por la gente.
· Es única en su traducción: El libro mas traducido y parafraseado.
· Es única es su supervivencia: Ha sobrevivido al tiempo, la persecución y la crítica.
· Es única en sus enseñanzas: Wilbur Smith dijo: “Sea cual fuere la idea que tengamos respecto de la autoridad y del mensaje presentado en el libro que llamamos la Biblia, existe consenso unánime de que en muchos sentidos este es más notable volumen que se haya producido en estos cinco mil años de escritura por parte de la raza humana”
· Es única en su influencia sobre la literatura circundante. El libro de Dios ha inspirado a grandes escritores de todos los tiempos. En un discurso pronunciado en la Real Academia Española el 16 de abril de 1843, el escritor y político español Juan Donoso Cortés dijo: “Hay un libro, tesoro de un pueblo que es hoy fábula y ludibrio de la tierra, y que fue en tiempos pasados estrella del Oriente, adonde han ido a beber su divina inspiración todos los grandes poetas de las regiones occidentales del mundo, y en el cual han aprendido el secreto de levantar los corazones, y de arrebatar las almas con sobrehumana y misteriosas armonías. Ese libro es la Biblia, el libro por excelencia”. Si no existiera la Biblia Dante no habría escrito “LA DIVINA COMEDIA”. Si no existiera la Biblia Milton no habría escrito “EL PARAISO PERDIDO”. Si no existiera la Biblia no tendríamos las bellas pinturas y esculturas de Miguel Ángel y de centenares de otros pintores de fama. La Biblia también está presente también en la obra del apóstol de la nación, nuestro José Martí.
Le invito llevar sus sueños a Dios, sobre La Biblia en Cuba, “pues Dios es quien produce en ustedes tanto el querer como el hacer para que se cumpla su buena voluntad”. (Flp 2.13).
Oremos:
1. Para que La Biblia señoree en el corazón de cada cubano. “Dichosos los que guardan sus estatutos y de todo corazón lo buscan. Jamás hacen nada malo” (Sal 119.2-3)
2. Para que La Biblia este presente en las escuelas como parte de la formación de las nuevas generaciones. “¿Cómo puede el joven llevar una vida íntegra? Viviendo conforme a tu palabra”. (Sal 119.9)
3. Para que ninguna ley que apruebe nuestra nación este en desacuerdo con La Biblia. “La palabra del Señor es justa” (Salmo 33:4) “Dichosa la nación cuyo Dios es el Señor” (Salmo 33:12)
Agradezca:
En su tiempo de oración agradezca a Dios también por todas las Biblias que se han distribuido en la nación en los últimos años de manera gratuita, gracias a ofrendas generosas de miles de hermanos en todo el mundo. Agradezca también por la vida del Rev. José López, que durante 30 años ha ministrado fielmente en la distribución de la Palabra como Secretario de la Comisión Bíblica de Cuba y que el próximo 13 de enero del 2009, en la Iglesia Bautista “El Calvario”, de Zulueta y Dragones, en La Habana, se retirará de manera oficial de tan importante ministerio.
Ore También:
Hoy 7 de Diciembre también es el día en que murió el lugarteniente General Antonio Maceo Grajales durante la guerra de independencia. Ha sido declarado también el Día de los caídos en nuestras guerras de independencia. Recuerde en sus oraciones a las familias que han perdido alguno de sus hijos por motivo de las guerras. Pida a Dios que llegue ese día en que “Él juzgará entre las naciones y será árbitro de muchos pueblos. Convertirán sus espadas en arados y sus lanzas en hoces. No levantará espada nación contra nación, y nunca más se adiestrarán para la guerra”. (Is 2.4)
Oremos sin cesar por Cuba. ¡Que no se canse nuestro ánimo, porque a su tiempo segaremos, si no desmayamos!
José Enrique Pérez
Día 259, año de oración por Cuba
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